¿Por qué te encantará esta receta de pollo y arroz mexicano?
Cuando tomes tu primer bocado de esta receta de Pollo y Arroz Mexicano, entenderás instantáneamente por qué es un favorito en mi cocina. Los sabores bailan juntos, creando una mezcla perfecta de salado y picante.
Cada bocado ofrece pollo tierno, arroz esponjoso y un toque de calidez de las especias. No es solo una comida; es un abrazo reconfortante en un plato.
Además, es fácil de preparar, lo que la hace ideal para las noches ocupadas. Te encantará lo versátil que es también: perfecta por sí sola o acompañada de tu salsa favorita.
¡Confía en mí; la desearás una y otra vez!
Ingredientes de Pollo y Arroz Mexicano
Cuando se trata de preparar una comida deliciosa, tener los ingredientes adecuados es la mitad de la batalla. Para esta receta de Pollo y Arroz Mexicano, reunirás un puñado de ingredientes simples pero sabrosos que se combinan para crear un plato lleno de sabor. Confía en mí, una vez que tengas todo listo, la magia sucede en poco tiempo.
Así que vamos a sumergirnos en lo que necesitarás para hacer este plato reconfortante que es perfecto para una cena acogedora o una divertida comida entre semana.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 1/2 libras de pechugas de pollo sin piel y deshuesadas
- Sal (al gusto)
- 2 1/2 cucharadas de chile en polvo ancho seco
- 1 cebolla blanca, picada
- 1 taza de arroz blanco de grano largo
- 4 dientes de ajo, picados
- 2 tazas de caldo de pollo
- 1 (19 onzas) lata de frijoles negros, escurridos y enjuagados
- 1/3 de taza de cebolla verde, picada
Ahora, hablemos un poco sobre esos ingredientes. Primero que nada, no seas tímido con el chile en polvo ancho; añade una hermosa ahumados que realmente eleva el plato.
Si te sientes aventurero, incluso puedes experimentar con diferentes tipos de frijoles o agregar algunas verduras para darle color y crocancia. Oh, y no te preocupes si no tienes arroz de grano largo a mano; puedes sustituirlo por el arroz que tengas en tu despensa. Solo ten en cuenta que los tiempos de cocción pueden variar.
Además, recuerda que el ajo fresco y las cebollas pueden hacer una gran diferencia en el sabor en comparación con sus contrapartes en polvo. Se trata de esos pequeños detalles que pueden convertir una buena comida en una gran comida.
Cómo hacer pollo y arroz mexicano

¿Listo para sumergirte en el delicioso mundo del Pollo y Arroz Mexicano? ¡Vamos a cocinar!
Lo primero es lo primero, agarra 2 cucharadas de aceite de oliva y caliéntalo en una cacerola grande a fuego medio-alto. Quieres que ese aceite esté bien caliente, así que chisporrotea cuando agregues el pollo. Hablando de pollo, necesitarás 1 1/2 libras de pechugas de pollo sin piel y deshuesadas. No olvides espolvorear generosamente ambos lados con sal y 1 cucharada de ese rico pimiento ancho ahumado en polvo.
Una vez que el aceite esté lo suficientemente caliente, coloca cuidadosamente el pollo sazonado en una sola capa en la sartén. Déjalo cocinar durante unos 2 a 3 minutos de cada lado, hasta que esté hermosamente dorado. Cuando esté listo, retira el pollo a un plato, dejando la mayor cantidad de aceite posible; queremos que ese sabor se quede en la olla.
Ahora que el pollo está fuera, es hora de construir los sabores. Agrega 1 cebolla blanca picada y 1 taza de arroz blanco de grano largo en ese aceite lleno de sabor. Cocínalo durante aproximadamente 2 minutos, revolviéndolo hasta que el arroz se vuelva opaco.
En este punto, añade 4 dientes de ajo picados y la restante 1 1/2 cucharadas de pimiento ancho en polvo. Dale una rápida revoltura y deja que se cocine por otro minuto. Luego, vierte 2 tazas de caldo de pollo y lleva todo a ebullición. Una vez que esté burbujeando, reduce el fuego a medio-bajo, cubre la olla y deja que cocine a fuego lento durante 10 minutos.
Después de eso, ¡es hora de regresar el pollo! Añade el pollo y 1 lata de frijoles negros escurridos y enjuagados a la olla. Cúbrelo de nuevo y déjalo cocinar durante otros 12 minutos. El olor será celestial; solo espera.
Cuando llegue el momento, destapa la olla y espolvorea 1/3 de taza de cebollas verdes picadas por encima. Haz una prueba de sabor al arroz; si no está del todo hecho, no te preocupes. Simplemente cocínalo por otros 5 minutos.
Finalmente, deja que todo se enfríe durante unos 5 a 10 minutos para terminar de vaporizar, esponja con un tenedor y prepárate para servir. Puedes agregar un poco de salsa o salsa picante por encima para un toque extra. Y ahí lo tienes, un plato reconfortante que seguramente impresionará, incluso si solo quemaste tu tostada esta mañana. ¡Feliz cocina!
Sustituciones y Variaciones de Pollo y Arroz Mexicano
Si estás buscando variar tu Pollo y Arroz Mexicano, hay muchas sustituciones y variaciones que puedes considerar.
Puedes cambiar el pollo por camarones o tofu para un toque de proteína diferente. Prueba usar quinoa en lugar de arroz para un giro nutritivo. Si quieres un toque picante, añade jalapeños o chiles chipotles.
Incluso puedes reemplazar los frijoles negros por frijoles pintos o rojos. Para las verduras, agrega pimientos, maíz o calabacín.
Finalmente, experimenta con diferentes especias como comino o pimentón ahumado para realzar el perfil de sabor. ¡Las posibilidades son infinitas, así que sé creativo!
Qué servir con pollo y arroz mexicano
Mientras disfrutas de una abundante porción de Pollo Mexicano con Arroz, podrías preguntarte con qué acompañarlo para realzar la comida.
Me encanta servirlo junto a guacamole fresco y totopos crujientes para un crujido delicioso. Una guarnición de ensalada de maíz picante añade un toque vigorizante, mientras que una simple ensalada verde con vinagreta de lima complementa los sabores de manera hermosa.
¡No te olvides de un tazón de salsa o pico de gallo para ese toque extra de sabor! Si te sientes aventurero, un lado de frijoles refritos completa el plato a la perfección.
¡Estas combinaciones hacen que cada bocado sea aún más satisfactorio y delicioso!
Consejos y Notas Adicionales
Para garantizar que tu Pollo y Arroz Mexicano salga perfectamente, te recomiendo usar pollo de alta calidad y ingredientes frescos siempre que sea posible.
No omitas el tiempo de reposo después de cocinar; ayuda a que los sabores se mezclen maravillosamente. Si deseas un toque más picante, siéntete libre de agregar jalapeños picados durante el proceso de cocción.
Para un sabor más rico, considera usar caldo de pollo casero en lugar de comprado en la tienda. También puedes cambiar los frijoles negros por frijoles pintos o rojos según tu preferencia.
Finalmente, no dudes en decorar con cilantro fresco o aguacate para un toque extra. ¡Disfruta experimentando y encontrando tu equilibrio perfecto de sabores!